jueves, 28 de enero de 2010

El espacio en blanco

Los errores le pasan a cualquiera,
nadie se puede librar de ellos y quien diga que no se ha equivocado
merece la patada más fuerte de todos los tiempos...


Por ahí dicen que lo importante no es regarla sino pedir perdón. Es genial cuando una persona pide una disculpa sincera a otra por más tonto que haya sido el error. Por ejemplo, si vas en el metro y pisaste a una señora sin querer, el hecho de voltear a verla y decirle “¡shut! discuple” porque te nace, es bueno. Sonará cursi-ñoño, pero es una forma de sanar el ego.

si es que no traes prisa o andas de malas...

¿Pero qué pasa cuando la regaste y no quieres pedir perdón? Nada. De hecho, es mejor no pedir una disculpa a hacerlo por obligación o porque es lo moralmente correcto... No importa que sea por ego, por pena o por puro orgullo, cada quien tendrá sus razónes y aunque luego haya gente que diga “híjole, qué poca” es mejor callar que ser hipócrita.

si nace, órale; sino ntp...


Ok. Hasta estas situaciones, la cosa va bien porque de alguna u otra manera, sabes que hay algo que hiciste mal.

¿Pero qué pasa cuando sabes que la regaste y después ya no sientes nada más? Ni resentimiento, ni orgullo, ni enojo, ni tristeza, ni odio, ni felicidad: nada... Vamos, ni siquiera hay un mínimo remordimiento en tu cabeza o tu conciencia te dice “ya weeee, pídele perdón”.

¡Ah! pero no sólo es eso porque todavía sigue habiendo una cosa en ti que tiene ganas de sentir algo. Aún hay una parte que no está satisfecha, ni para bien ni para mal. Es un sensación parecida a cuando lograste algo chingonsísimo y luego piensas “WTF! ¿y ahora qué?”



Por alguna extraña razón, todavía hay un hueco, un espacio en blanco que exige ser llenado pero, ni modo, no hay con qué...

Lo malo es cuando te pasa a ti. Lo peor es cuando no te inmutas. Pero el mero problema es que sabes que eso se llama indiferencia y que no puedes hacer nada para que te deje de molestar...

miércoles, 27 de enero de 2010

Ahora sí se la rayaron

Sí, es cierto que soy fan de Apple y que casi, casi podría morir defendiendo a la compañía de las genialidades, porque eso de haber creado la primer computadora personal a la venta, los primeros y más originales reproductores de mp3 y el celular multiusos que renovó las expectativas del mercado, deja en claro que Apple es una empresa muy poderosa.

Pero bueno, como siempre y hasta en las compañías más prometedoras, surgen errores para recordar... y la verdad es que hoy Apple se la rayó sacando un nuevo productotote llamado i-touchsotote iPad:

creo que la biblia está más pequeña...


Ok. Le puedes meter mil-ocho-mil aplicaciones, música, videos, libros, periódicos, es táctil, de alta resolución, trae wi-fi, etc. Pero su tamaño mata todas sus posibles virtudes... De hecho cuando lo vi por primera vez, luego, luego lo relacioné con los iphonesotes que ponen en los centros de atención a clientes de Telcel:

¡están del mismo tamaño!


Ni modo, el ipad está taaaan grande que no va a caber en mis bolsillos, ni en mi bolsa, ni en mi mochilota de geek.

A ver si luego sacan la versión mini o nano, yo creo así sí me animo...



*** UPDATE ***
(05/04/10)

Y aunque soy de Jalisco, sí me rajo... acepto que quiero un iPad y que envidio sobremanera a quienes ya tienen uno. Eso me pasa por criticona, sniff. ¡Mamaaaá!

domingo, 24 de enero de 2010

Ya todo mundo tiene libros publicados...


Desde hace ya mucho tiempo las editoriales se han dedicado a publicar libros al por mayor. Vamos, ya ni si quiera les importa si el libro es bueno, o si trae un mensaje original, o si el escritor necesitó hacer una investigación en la que casi muere. No. Ahora el único requisito que las editoriales piden es que venda muchísimo y ya (sino pregúntenle a Carlos Cuauhtémoc Sánchez).

Pero bueno el punto es que el mundo está tan mal que no sólo los humanos tienen libros. Ahora hasta los mismísimos animales tienen sus propias publicaciones y nos cuentan sus memorias, miren nada más:


WTF!

Ya no sé si reír o llorar: todos tienen libros publicados menos yo, sniff...

lunes, 18 de enero de 2010

Redacción cursi-ñoña

La verdad es que éste no es ni debería ser un post... de hecho es una tarea posteada. Entonces si usted, querido lector, quiere evitarse la pena de leer una redacción cursi-ñoña, mejor córrale acá y diviértase haciendo un quiz de qué tan adicto es a Twitter... de todas formas, mañana subiré algo más "digno" de ser posteado

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Ahora que si ha tenido compasión y decidió quedarse a ver qué onda, se le agradece, usted también me cae bien =) ... Entonces, la redacción cursi-ñoña está aquí:


La objetividad como esencia, no como recurso

Durante mucho tiempo, el periodismo se ha utilizado como un medio masivo, a través del cual la gente está informada de lo que acontece no nada más a su alrededor, sino también en el mundo entero. De hecho, la importancia del periodismo es tan grande que se dice que “el periodismo es la historia del presente”. Sin embargo, al ser de vital importancia, el periodismo, como cualquier otra disciplina, llega a tener errores. Unos más graves que otros, pero al final de cuentas errores que todos pagamos porque de alguna u otra manera somos parte de esta disciplina, ya sea como colaboradores o como receptores. Por esta razón, considero que el peor defecto que el periodismo puede llegar a tener es la falta de objetividad.

Día a día ocurren sucesos que no pueden pasar desapercibidos por un simple hecho: vivimos en sociedad. Y es de esta necesidad que surge el periodismo. Sin embargo, difundir una noticia o cualquier hecho no es tan fácil como parece. Los hechos deben ser narrados de una manera que pocos saben: únicamente se debe contar lo que sucedió, de la manera más objetiva posible y excluyendo los juicios propios.

Como principal objetivo, todos los diarios en línea e impresos aseguran ser objetivos. Claro, ninguno a primera instancia se atrevería a declarar que tiene cierta tendencia porque en ese momento su reputación se iría al suelo. Sin embargo, estas inclinaciones no siempre se deben a la empresa o al periódico en sí. En muchas ocasiones, estas tendencias se deben a la falta de preparación de los mismos periodistas, quienes no saben cómo abordar las noticias.

La precisión es básica para el periodismo aunque, desgraciadamente, muchos la han cambiado por notas que venden. Por ejemplo, sucede que un carro chocó en la carretera a las tres de la mañana y es una nota importante. La manera más sencilla de abordar este hecho sería de forma amarillista. Sin embargo, esta noticia da para más. Está bien narrar qué sucedió y, por qué no, los heridos que hubo. Sin embargo, también sería importante hacer una investigación más profunda de las condiciones del lugar del choque, las medidas de seguridad del carro, verificar si los límites de velocidad son adecuados y respetados, entre otros aspectos que no nada más informan, sino que impulsan el pensamiento crítico del público.

El periodismo es mucho más que contar lo que sucedió tal día y en tal lugar. El periodismo es la invitación más natural que una persona, en este caso un periodista, hace a otra con el fin de desarrollar juicios propios con información precisa e imparcial. Por eso, la objetividad no es un adorno o algo que otorgue prestigio a un diario. La objetividad es el primer requerimiento para adentrarse al verdadero periodismo.



Pd. se le agradece cualquier tipo de crítica/apreciación/comentario

jueves, 14 de enero de 2010

El disco duro

ESCENARIO:
Casa de los Gómez en Santa Lucía, estado de México, por aquello de 1996. Al fondo derecho se encuentra la sala que consta de 2 sillones, un librero y una tele. En el centro está la mesa de estudio y hay una computadora (de las de escritorio).

PERSONAJES
(en orden de aparición)
El papá
El hijo
La hija


EL DISCO DURO
la obra

El papá está sentado en la mesa de estudio, frente a la computadura,
mientras que el hijo y la hija están sentados en la sala viendo la tele.


EL PAPÁ.- Oye hijo, ya acabé el trabajo, ¿ahora qué hago?

EL HIJO.- ¡ah! está bien. Guárdalo en la computadora para que si lo vuelves a ocupar, no tengas que hacerlo otra vez…

EL PAPÁ.- bueno, ¿pero lo guardo en el disco duro?

LA HIJA.- ¡pues claro! para que no se te rompa

**cric, cric**

FIN.

lunes, 11 de enero de 2010

Hoy como siempre

Domingo 10

8:45 ¿No dijiste que hoy ibas a ir al Centro Cultural La Pirámide para ver dónde quedaba? Ja. Hoy como siempre: sicierto, se me pasó. Entonces me desperté rápido porque en ese centro cultural voy a hacer un examen para aplicar a una universidad. Y lo que menos quiero es el mero día salir con mi chistecito de “me perdí” o “ay, perdón... se me hizo tarde”.

9:15 Deberías buscar cómo llegar... si nada más andas preguntando te vas a perder. Ja. Hoy como siempre: buscaré en google maps. Entonces prendí la compu y busqué. Google maps me dijo cómo llegar en carro, pero para qué le hago, ni sé manejar y ni me van a llevar en carro. Así que mejor busqué cómo irme en metro.

11:48 Bien, sí diste con el lugar y no te tardaste mucho... ¿ves como cuando haces las cosas con anticipación y planeándolas salen bien? Ja. Hoy como siempre: ¿aquí es el centro cultural? ¿aquí voy a hacer el examen? no manches, yo me imaginaba otra cosa, algo más acá. Creo que me equivoqué. Aunque viéndolo objetivamente, no está tan mal. Digo, con que haya bancas y no haya ruído todo está bien.

12:04 Ya sabes dónde es, cómo llegar y por dónde entrar, ya regrésate, quizá tienes que hacer algo y no te acuerdas. Ja. Hoy como siempre: nah... nunca tengo nada qué hacer, pero está bien, me regresaré a mi casa. Dicho y hecho, me fui, al fin que ya sabía bien cómo llegar.

14:26 Oye, ¿y si estudias para el mentado examen? ya estás en la casa y no tienes qué hacer. Ja. Hoy como siempre: está bien, pero antes deja comer y checar unas cosas en la compu. Lo hice rápido y a la par porque sí quería estudiar. Ese p. examen me trae por los suelos.

20:58 Ya estás cansada y hace mucho que ya no procesas bien la información... te doy chance de que pachequees un rato. Ja. Hoy como siempre: está bien, no me insistas. Entonces me puse a malgastar el tiempo con lo de diario: checar el correo, twitter, facebook, el Universal y The New York Times.

22:12 ¡Trin! Mensa, mañana entras a la escuela ¿ya tienes las cosas preparadas? Ja. Hoy como siempre: no, se me pasó por completo. Entonces intenté compensar mi irresponsabilidad haciendo todo lo que se debe hacer con anticipación para regresar a clases: imprimir el horario, buscar una mochila, la credencial, los cuadernos, plumas, la ropa, el desayuno...

23: 21 ¿Crees que tu cuerpo no necesita descanso o qué? ¿Cómo pretendes dormirte a las 12 y despertarte a las 4 de la mañana? Ja. Hoy como siempre: no te preocupes, mente, estaré bien... mañana me duermo temprano. Entonces hice mi último twit del día, apagué la computadora y me fui a dormir.


Lunes 11


4:30 Ya es hora de que te despiertes, al rato se te va a hacer tarde. Ja. Hoy como siempre: 5 minutitos más, al fin que el multiusos es tan genial que cada 9 minutos vuelve a sonar. Por alguna extraña razón mi multiusos no sonó. Me quedé dormida.

5:14 ¡Chingao! Te dije que se te iba a hacer tarde... Órale, levántese de zopetón, se te va a ir el camión. Ja. Hoy como siempre: ¡Shut! Sicierto, ya voy, ya voy. Entonces me vestí rapidísimo y quien sabe cómo pero para las 5:30 ya estaba en la parada del camión y ya había desayunado y todo.

6:11 Entras a clase hasta las 7:00, pero está bien que estés a tiempo, preferible ¿no? Ja. Hoy como siempre: estoy temprano porque el transporte me obliga. La verdad es que desde que me vine a vivir acá, cerca de la ciudad de México, me he vuelto bien impuntual... yo no era así. Por algo dicen que las personas cambian.

7:05 Ya tuviste casi 1 hora para chismear de las vacaciones, ahora por favor concéntrate. Ja. Hoy como siempre: me siento hasta en las primeras bancas para poner atención como dios manda, pero no funciona. Es cierto que las primeras clases son de relajo, pero si según yo quiero ser una mejor estudiante para ahora que entre a la universidad, debo ensayarlo desde ahora.

12:04 Está bien que no hayas ido a entrenar, esas 2 horas las gastaste en estudiar para el mentado examen... ahora viene la clase esa que tanto esperabas. Ja. Hoy como siempre: =) esta clase es de las pocas que me gustan, entonces le echaré ganas. Así que puse toda mi atención y apuntaba cada palabra que la maestra decía. Ella es genial. Estudió en la UNAM, tiene una maestría, un doctorado, hace investigación y el otro día me regaló un libro que ella misma hizo. La amé. Si fuera hombre le pediría matrimonio. ¡Lástima!

16:56
Ya saliste de la escuela, sería bueno que te pusieras a hacer la tarea y luego si quieres, sigue estudiando para el mentado examen. Ja. Hoy como siempre: ¡ujule! tengo que hacer otras cosas. Con otras cosas me refería a sacarme unas fotos para el día del examen y comprar café, por ejemplo. Es cierto: si hay alguien irresponsable en este mundo, ésa soy yo.

17:34 ¿Ya no? Te recuerdo que tienes que estudiar en chinga loca porque así que digas “wow, andas muy bien para el examen” pues no. Ja. Hoy como siempre: ¡qué te crees, mente! deja primero hago la tarea. Entonces me puse a hacer la tarea. ¡Ah, pero eso sí! Antes de eso me hice un café para saber si había hecho una buena compra o no.

21:05 Eres patética e irresponsable, sabes... pero X, ya pasó, ahora sí ¡a estudiarle! Ja. Hoy como siempre: querida mente, ¿me das chance de hacer un post? breve, lo prometo ¿sí?... Mi mente dijo que no pero me importó un bledo. Y aquí está el resultado: ni tan breve ni tan post.

***

A veces pienso que, en efecto, soy la persona más irresponsable (y patética)... A pesar de que todas las vacaciones me la pasé estudiando (y ñoña), no me siento lo suficientemente preparada (e insegura). ¡No mamar! es el examen que determinará mi futuro. No quiero considerar ningún margen de error (y perfeccionista).

A veces pienso que debería relajarme, pero basta con hacer un examen de prueba para ver mis ridículos resultados y decir “eres como cualquiera, échale ganas”

jueves, 7 de enero de 2010

Post desde el aeropuerto en tiempo real

¡Pues claro! Ni modo que digan que su comida es mala...

Esos gringos son extremadamente ocurrentes, ni hablar... [Aunque lo peor es que me gasté los últimos centavitos ahí porque me convencieron (aplausos para mí)]

martes, 5 de enero de 2010

Ya cumplí mi sueño americano

¡Así es! Por fin hice realidad mi anheladísimo sueño americano: visitar un Apple Store.

Y no nada más lo visité, sino que
también le compré un control a la Cream Soda



La verdad es que mi sueño americano abarcaba más cosas:
“ Yo quiero ir para visitar un Apple Store, traerme un R2D2, surtirme de ipods, comprar muchos Wiimotes y, de paso y con mucha suerte, encontrarme a Steve Jobs y pedirle un autógrafo…”
¡Bah! puras suplerfluidades. Lo único, y real, que vale la pena es visitar un Apple Store, y eso ya se cumplió...


Es importante mencionar que hace como 5 meses, ya había venido al gabacho... Recuerdo también que como nunca prevengo nada, tuve que sacar mi pasaporte y la visa para esa ocasión... fue una gastadera de dinero. Además, también tuve que comprar los boletos de avión, que por cierto me salieron casi al doble por comprarlos como 15 días antes...

Pero bueno, el punto es que esa vez (la primera de 2) no lo disfruté como dios manda porque ni iba de señora-rica-consolidada, ni a turistear, ni a hacer negocios... iba por encierros asuntos escolares y durante todo una semana no se dignaron a pasearnos...

Así que me quedé traumada y mi sueño americano, en lugar de pasar desapercibido u olvidarlo, se volvió más obsesivo... Pero oh bendición: como mi hermano iba a venir a México para las posadas y se iba a regresar en carro, decidí colarme para “acompañarlo”.

Entonces, después de convencer a mis papás y de viajar 21 horas en carreteras desérticas, llegamos a Albuquerque. Y ándale, que descansar ni qué nada: directito al Apple Store porque ni pensarlo, mi anheladísimo sueño americano no se me volvería a escapar de las manos...

¡Ahhhhhh!
Ahora sí: ya me puedo morir =)

domingo, 3 de enero de 2010

Se llama Cream Soda

El karma existe y por alguna extraña razón se acordó que existo, me tuvo lástima y se apiadó de mí: ¡ya tengo compu nueva!


Y venía con una notita que decía:
“Órale pues... ahí está para que ya no estés ch¡#&^$*#”



Sí: es nueva, nueva, nueva, nueva. No heredada, ni de segunda mano: nueva de verdad. Recién salida de la caja y toda la cosa...

Es una MacBook de 13.3 pulgadas. Con 2GB en RAM y 250 en el disco duro. La batería le dura 7 horas. Puede correr Windows y MacOS a la vez. Su interfaz es pura belleza. Y, en honor a la primer computadora que hizo Steve Wozniak por ahí de 1965, se llama Cream Soda... ¡Ah! finísima persona computadora. La amo.

Ya no tengo de qué quejarme. Antes lloriqueaba porque tenía 2 compus: una Dell Heredada, grandísima y pesada; y una Mac Viejita, que era tan vieja que ni a Mac llegaba: era iBook. Pero como de las 2 no se hacía una, tenía que usar ambas simultáneamente (es aquí cuando los ecologistas atacan). Pero eso no volverá a pasar porque Cream Soda ya las reemplazó.

Bendito karma, se rifó. Ahora todo es rosa (¿o blanco?) y ya “cuido el ambiente”, por eso de la gastadera de luz... Además, la Cream Soda es tan perfecta que sigo pensando que no la merezco, aunque me niego a regresarla, cambiarla o deshacerme de ella.

La amo.